Texto Principal: Josué 9:14
Predicación Domingo 15 de Septiembre de 2019 – Apóstol Enrique Torra
Introducción: Josué es el hombre a quien Dios designó como sucesor de Moisés para guiar al pueblo de Israel en la conquista de Canaán. Josué comprendió que el cumplimiento de las promesas que Dios le había hecho de bendecir a Israel dependía de la actitud del pueblo. Las promesas de victoria, la entrega de la herencia, provisión abundante, paz y reposo, llegaría si el pueblo se mantenía obediente a Dios.
I. LAS CONSECUENCIAS DE LA DESOBEDIENCIA A LA PALABRA DE DIOS
El pecado de Acán nos enseña que nadie vive exclusivamente su propia vida, porque el pecado de uno afecta la vida de muchos. Josué 7. La desobediencia de Acán es vista como la de todo el pueblo. El pecado siempre tiene implicaciones colectivas. Josué 7:1
II. ORE PIDIENDO DIRECCIÓN DE DIOS ANTES DE TOMAR UNA DECISIÓN
Josué no consultó a Dios en oración para recibir su dirección respecto a lo que debía hacer con los gabaonitas. Muchos de los problemas que hoy enfrentamos se hubieran evitado si hubiéramos buscado la dirección de Dios a través de la oración. Dios escucha la oración de fe y la responde.
III. ¿CÓMO PERCIBIMOS LA VOZ DE DIOS?
Cuando oramos a Dios pidiendo dirección acerca de las decisiones que debemos tomar, Espíritu Santo nos “guía a toda la verdad” Juan 16:13; nos revela las cosas que no comprendemos. Dios dice “Te enseñaré el camino por donde debes andar; sobre ti fijaré mis ojos” Salmo 32:8
La constante meditación en Palabra de Dios y la fidelidad a sus mandamientos es el principio para disfrutar de la bendición de Dios y alcanzar la prosperidad. Josué 1:8 ¿Cómo percibimos la voz de Dios?
IV. LA ORACIÓN NOS LIBRA DEL ENGAÑO DEL ENEMIGO
Por segunda vez Josué actúa sin consultar a Dios. La primera vez fue en Hai. Josué 7:1-2 Josué no tuvo en cuenta la Palabra de Dios respecto a no hacer alianza con los habitantes de Canaán. Deuteronomio 7:1-2; 20:10-16 “Reconócelo en todos sus caminos, y Él enderezará tus veredas. No seas sabio en tu propia opinión; teme a Jehová, y apártate del mal; porque será medicina a tu cuerpo, y refrigerio para tus huesos”. Prov. 3:6-7
Conclusión. Decidir sin haber consultado a Dios pidiendo dirección, es actuar con arrogancia y la autosuficiencia; esa es la causa de los fracasos en la vida, es lo que nos priva del éxito que Dios nos ha prometido en todos nuestros caminos. Si esto fue lo que ocurrió en su vida, está a tiempo de corregir su conducta a través del arrepentimiento y sumisión a la Palabra de Dios de la manera que lo hizo Josué cuando fue engañado por los gabaonitas. “Encomienda a Jehová tu camino, y confía en Él; y Él hará´”. Salmo 37:5